El gobierno argentino, bajo la administración de Javier Milei, planea mantener el cobro del peaje en la sección argentina de la Hidrovía Paraná-Paraguay, desencadenando tensiones diplomáticas con Paraguay. La canciller Diana Mondino indicó durante una reunión del Mercosur que están dispuestos a discutir y posiblemente reducir el monto del peaje. La tarifa actual, criticada por empresarios navieros paraguayos, es de 1,47 dólares por tonelada para barcazas que iniciaron su viaje en puertos extranjeros.
La medida ha generado descontento en Paraguay y otros países del Acuerdo de Santa Cruz de la Sierra sobre la Hidrovía. El gobierno argentino ha sido criticado por imponer unilateralmente este peaje, aunque en la reciente cumbre del Mercosur se reconoció por primera vez esta situación. Se planteó la necesidad de revisar el costo de las obras relacionadas con la Hidrovía y determinar quién asumirá estos costos.
La posición paraguaya respecto al peaje es que no se oponen a él, pero solicitan evidencia de que las obras realizadas sean útiles para la navegación fluvial. Javier Milei y el ministro de Infraestructura designaron a Gastón Benvenuto como interventor de la Administración General de Puertos, quien deberá justificar las obras realizadas y el monto del peaje. Estos eventos han marcado una intensificación de las tensiones en torno a la Hidrovía Paraná-Paraguay.