El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, criticó el sistema de coparticipación de impuestos, argumentando que es arbitrario y perjudica a la provincia. Su declaración desencadenó una serie de críticas por parte del partido político PRO, incluyendo figuras prominentes como María Eugenia Vidal, Diego Santilli y Cristian Ritondo. Estos últimos reprocharon a Kicillof por la situación de la salud pública en la provincia, señalando problemas como la falta de recursos en hospitales y la saturación del sistema sanitario.
Kicillof, en su publicación, insistió en que la provincia no es inviable, pero que el sistema de coparticipación debe ser reformado para garantizar un reparto más equitativo de recursos. En respuesta, los dirigentes del PRO señalaron la gestión del gobernador en aspectos como la deuda de YPF y la situación de la salud pública como ejemplos de su presunta incapacidad para gobernar la provincia.
El cruce de declaraciones entre Kicillof y los dirigentes del PRO refleja la tensión política existente en torno a temas como la distribución de recursos y la gestión de la salud pública. Mientras Kicillof busca reformas en el sistema de coparticipación, sus críticos lo responsabilizan por las deficiencias en la provincia, generando un debate público sobre la eficacia de su gobierno y las políticas implementadas hasta el momento.