Este martes, el tratamiento de la Ley Ómnibus se reanuda con un estancamiento evidente en las negociaciones debido a los artículos en disputa. En la Casa Rosada, se ha dejado claro que la coparticipación del Impuesto País no será tema de discusión, lo que ha generado tensiones con la oposición. A pesar de esto, diputados cordobeses presionan para que se incluya este tema en la discusión, argumentando que las provincias no se benefician con el proyecto actual y ya están afectadas por otras medidas fiscales.
El ministro del Interior, Guillermo Francos, ha afirmado que si la oposición insiste en tratar el Impuesto País, el Gobierno tiene la intención de vetarlo. Esta postura ha generado reacciones tanto en la oposición como en las provincias, especialmente en Córdoba, donde el gobernador Martín Llaryora está ejerciendo una fuerte presión para que la coparticipación sea parte de la discusión.
La tensión entre oficialismo y oposición se refleja en la dificultad para alcanzar consensos. Los gobernadores, a su vez, esperan ser convocados para negociar. Mientras tanto, el Congreso se prepara para debatir los diferentes puntos del proyecto, con la incertidumbre sobre si se logrará un acuerdo satisfactorio para todas las partes involucradas.