La creación del Fondo de Incentivo Docente durante la administración de Carlos Menem ha sido clave en la disputa, ya que este fondo proporciona un apoyo adicional a las provincias para mejorar los salarios de los maestros. La falta de envío de estos fondos ha llevado a una respuesta conjunta de los ministros de Educación de las 24 jurisdicciones, que han firmado un reclamo conjunto, advirtiendo sobre el riesgo de retrasar el inicio de clases.
La situación se agrava con las declaraciones del vocero presidencial, Manuel Adorni, quien indica que los fondos no serán transferidos debido a la inexistencia actual del Fondo de Incentivo Docente. Esta afirmación contradice las creencias de las provincias, que consideran que el envío de estos fondos está contemplado en una ley.
En respuesta a la falta de fondos, el gobernador Weretilneck ha expresado su preocupación por el inicio de clases en todo el país, señalando el impacto en Río Negro debido al contexto creado por la falta de transferencia de fondos educativos. Además, el ministro del Interior, Guillermo Francos, ha instado a los gobiernos provinciales a ajustar sus cuentas y operar dentro de sus medios, argumentando que el Gobierno Nacional no puede continuar con prácticas económicas anteriores.
La presentación de un proyectode ley por parte de diputados peronistas para extender la vigencia del Fondo de Incentivo Docente durante cinco años muestra la preocupación y la voluntad política de resolver el conflicto. Mientras tanto, otras provincias, como Chubut, también están tomando medidas legales contra la eliminación de otros fondos estatales, como el Fondo Compensador al interior, evidenciando la complejidad y la profundidad de la disputa entre el Gobierno Nacional y las provincias.