El presidente, tras el fracaso en el debate de la ley ómnibus en Diputados y la creciente percepción pública de que Javier Milei es responsable de la situación económica, ha decidido intensificar su confrontación con diversos sectores, desde la “pelea cultural” con la cantante Lali Espósito hasta las denuncias contra gobernadores y los sindicatos docentes. Esta semana, su gobierno retrocedió en la confrontación con Espósito y avanzó en la intención de declarar a la educación como “servicio esencial”, limitando el derecho a huelga de los maestros. Además, continúa su enfrentamiento con la CGT y los gobernadores, prometiendo mantener una postura firme.
El líder libertario, mientras avanza con su plan de reducción del Estado, intensifica sus críticas hacia lo que considera “enemigos del cambio”, principalmente los gobernadores, luego del revés sufrido con la ley ómnibus. Esta confrontación se evidenció con medidas como la no prórroga del Fondo de Incentivo Docente y la eliminación de subsidios al transporte público del interior, acciones que generaron tensiones con provincias como Córdoba.
Por su parte, los gremios, conscientes del estilo confrontativo de Milei, se preparan para enfrentar posibles recortes en las obras sociales sindicales, lo que podría desencadenar medidas de fuerza. Mientras tanto, los sindicatos docentes rechazan la posibilidad de que la educación sea declarada servicio esencial, argumentando que esto limitaría su derecho a huelga y están considerando un plan de lucha ante el inicio del ciclo lectivo.
Además, Milei ha dirigido parte de sus críticas hacia Lali Espósito por participar en eventos organizados por gobiernos provinciales, aunque luego su discurso hacia la cantante se moderó. Mientras tanto, la consultora Zuban y Córdoba señala que una parte significativa de la sociedad responsabiliza a Milei por la situación económica, destacando que es la primera vez que se atribuye esta responsabilidad al gobierno actual en lugar de a la oposición.