El cierre de Télam forma parte de un decreto de intervención de los medios públicos, que también incluye a Educ.ar, Radio y Televisión Argentina, entre otros. La intervención, decretada por un año, delega el control de estas entidades en la Jefatura de Gabinete de Ministros, bajo la dirección de Diego Martín Chaher como interventor y Diego Sebastián Marías como interventor adjunto.
Las palabras de Milei han sido difundidas por la propia agencia a través de un cable informativo y en sus redes sociales. Esta acción refleja el impacto del anuncio del presidente en el ámbito mediático y político del país. La medida ha generado diversas reacciones en la sociedad, con opiniones divididas sobre la intervención en los medios públicos y el cierre de Télam en particular.
La clausura de la agencia de noticias estatal representa un paso significativo en la política de comunicación del gobierno de Milei. Se espera que esta decisión tenga repercusiones tanto en el ámbito de los medios de comunicación como en el panorama político argentino en general. Sin embargo, el futuro de Télam y el destino de los medios públicos bajo esta intervención aún están por determinarse.
El discurso del presidente en el Congreso ha generado debates sobre la libertad de prensa y el papel del Estado en el control de los medios de comunicación. Este acontecimiento marca un hito en la relación entre el gobierno y los medios de comunicación en Argentina, con posibles implicaciones a largo plazo en el panorama informativo del país.