Sin embargo, la propuesta gubernamental ha generado controversias. La inclusión parcial de la inflación de enero ha suscitado críticas por parte de la oposición, que demanda una compensación integral por la pérdida del poder adquisitivo de los jubilados y pensionados. Esta discrepancia entre el oficialismo y la oposición podría obstaculizar el avance del proyecto en el Congreso.
Por otro lado, el informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso señala una reducción significativa en el gasto previsional en términos reales. Esta reducción, atribuida en parte a la licuación de los ingresos de los jubilados por efecto de la inflación, ha permitido al Gobierno exhibir superávits en enero. No obstante, existe preocupación por la sostenibilidad de esta situación a largo plazo.
Ante esta situación, los partidos opositores están convocando a sesiones especiales para debatir el tema. Sin embargo, la obtención de quórum y la aprobación de cualquier proyecto requieren un respaldo significativo en el Congreso, lo que podría dificultar la concreción de cambios en la fórmula de movilidad jubilatoria.
En conclusión, la discusión sobre la fórmula de movilidad jubilatoria se ha convertido en un tema central en el ámbito legislativo. El Gobierno busca implementar cambios, pero enfrenta resistencia y críticas por parte de la oposición. La sostenibilidad fiscal y la protección del poder adquisitivo de los jubilados son aspectos clave en este debate en curso en el Congreso.
