La última subida del boleto urbano tuvo lugar el pasado 17 de febrero, elevando el precio de 340 a 700 pesos. En la actualidad, el municipio capitalino aporta unos 4 mil millones de pesos mensuales al sistema de transporte. Según estimaciones municipales, sin estos fondos, el costo del boleto debería haber alcanzado los 1.111 pesos hace aproximadamente 20 días.
El intendente Daniel Passerini no descarta ajustes mensuales en la tarifa en ausencia de subsidios. Indica que la actualización seguirá el índice inflacionario, con la esperanza de recuperar los recursos sustraídos por el gobierno nacional. Este nuevo aumento propuesto por la Fetap generará debates y preocupaciones entre los usuarios, dado el constante aumento del costo de vida.
La posibilidad de aumentos mensuales sin subsidios podría afectar el presupuesto de las familias cordobesas, creando tensiones adicionales en un contexto económico desafiante. La decisión final recaerá en las autoridades municipales, quienes deberán considerar los intereses de los usuarios y las empresas de transporte, asegurando transparencia y comunicación efectiva para garantizar la confianza y entendimiento de todas las partes involucradas.