El gobierno argentino busca enfocarse en la lucha contra la inflación, considerada la principal preocupación del país. Caputo ha mantenido conversaciones con representantes de diferentes sectores, como supermercadistas y CEOs de empresas alimenticias, instándoles a revisar sus listas de precios ante la fluctuación del dólar. Esta estrategia pretende impulsar una rebaja de precios que pueda cambiar la percepción negativa sobre la inflación.
A pesar de los esfuerzos del gobierno, las expectativas oficiales de alcanzar un dígito en la inflación aún no se han materializado. Consultoras estiman que el índice de precios de marzo se situó en torno al 12%, lo que representa una desaceleración respecto al mes anterior, pero aún lejos del objetivo del 10%. Caputo confía en que la inflación pueda llegar a un dígito en abril y trabaja para influir en las expectativas de los agentes económicos.
La situación económica argentina también es objeto de atención internacional, especialmente en las próximas reuniones del FMI y el Banco Mundial en Washington. Caputo busca fondos frescos para acelerar la salida del cepo y espera una posible cifra de desembolso del FMI de alrededor de 15.000 millones de dólares. Sin embargo, la incertidumbre persiste y es demasiado pronto para especular sobre este tema.
En resumen, la lucha contra la inflación continúa siendo una prioridad para el gobierno argentino, con Caputo liderando los esfuerzos para lograr una desaceleración significativa en los precios. A pesar de los desafíos, se mantiene el optimismo respecto a la posibilidad de alcanzar cifras de un dígito en abril, aunque la situación económica sigue siendo motivo de preocupación tanto a nivel nacional como internacional.