Por otro lado, el informe también destacó a aquellos gobernadores que no lograron alcanzar una buena percepción pública en el mes en cuestión. Ricardo Quintela de La Rioja, Axel Kicillof de Buenos Aires y Alberto Weretilneck de Río Negro fueron los peor calificados, con porcentajes de imagen positiva por debajo del 43%. Este contraste entre los mejores y los peores calificados resalta la importancia de la gestión y la percepción pública en el ámbito político.
En cuanto a los cambios más significativos, se observó que Maximiliano Pullaro de Santa Fe experimentó el mayor crecimiento en comparación con la medición anterior, con un aumento del 4.2% en su imagen positiva. En contraste, Alberto Weretilneck de Río Negro fue el gobernador que más cayó, con una disminución del 3.2% en su percepción pública.
Estos resultados reflejan la relevancia de la opinión pública en la política argentina y subrayan la importancia para los gobernadores de mantener una imagen positiva entre los ciudadanos. La consistencia de Osvaldo Jaldo en el top tres del ranking resalta su efectiva gestión y su capacidad para mantener el apoyo de la población tucumana.