El presidente Biden, ante la posibilidad de ataques, acortó sus vacaciones y regresó a la Casa Blanca para consultas urgentes. Las fuerzas estadounidenses han derribado algunos drones iraníes dirigidos hacia Israel, mientras se alerta sobre el posible lanzamiento masivo de drones y misiles desde múltiples ubicaciones, principalmente desde Irán. La advertencia pública de Biden a Teherán refuerza la postura firme de Estados Unidos frente a la escalada de tensiones en la región.
Se señala que representantes iraníes podrían estar involucrados en futuros ataques, lo que aumenta la preocupación sobre posibles objetivos dentro y alrededor de Israel. Estados Unidos ha observado movimientos militares iraníes, incluyendo el despliegue de drones y misiles de crucero, indicando una preparación activa para atacar desde su propio territorio. Esta situación genera una alerta máxima en la región y subraya la necesidad de una respuesta coordinada entre las naciones aliadas.