La solicitud, que llama la atención por la ausencia de la firma de Máximo Kirchner, se ha planteado para el martes 30 de abril a las 11 de la mañana. Esta movida busca abordar el DNU que ingresó al Congreso el pasado 5 de enero y cuyo tratamiento se ha visto obstaculizado por dilaciones en la formación de la comisión bicameral necesaria para su evaluación.
El DNU en cuestión, rechazado previamente por el Senado en marzo, con un resultado de votación que destacó 42 rechazos, no ha logrado el apoyo necesario para su implementación. Esta situación pone de manifiesto la división y las distintas posiciones dentro del espectro político argentino, y la urgencia de una resolución legislativa.
El pedido por parte de Unión por la Patria excluye a varias figuras prominentes del peronismo, además de Kirchner, entre ellas el sanjuanino Walberto Allende y el exgobernador de La Rioja, Sergio Casas. Esta división puede interpretarse como un reflejo de las estrategias internas y las alianzas cambiantes dentro del partido.
Finalmente, mientras el Congreso se prepara para la sesión, el escenario político se encuentra altamente polarizado, con fuertes opiniones tanto a favor como en contra del DNU. La decisión de Menem sobre la convocatoria a la sesión especial será crucial para determinar la trayectoria futura de la política argentina en relación con los decretos de necesidad y urgencia.