El vocero del personal policial, Ramón Amarilla, confirmó que las autoridades reconocieron la importancia de la policía como garantes de la seguridad en la provincia. Además, se anunció que todas las medidas acordadas tendrán efecto retroactivo al primero de enero de este año.
Durante los días de protesta, hubo cortes de calles y manifestaciones que incluyeron el uso de sirenas y humo. Los policías exigían una mejora del ciento por ciento en sus salarios, lo que generó una alta tensión en la provincia.
El acuerdo fue visto como una victoria tanto para los oficiales como para la comunidad, ya que permitió restablecer el orden y la seguridad en Misiones. Las negociaciones se llevaron a cabo con la mediación de altos funcionarios provinciales, incluyendo al ministro coordinador y al jefe de la policía de Misiones.
Finalmente, este acuerdo sienta un precedente importante en la negociación de salarios y condiciones laborales para las fuerzas de seguridad en la provincia, destacando la necesidad de diálogo y comprensión entre las partes implicadas.
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