Las condiciones meteorológicas dificultaron la visibilidad, afectando tanto el tráfico vehicular como a los peatones. Muchas personas que se desplazaban por la ciudad tuvieron que tomar precauciones adicionales para evitar accidentes.
Fotógrafos y residentes locales capturaron imágenes impresionantes de la ciudad envuelta en niebla, creando una atmósfera misteriosa y poco común. Este fenómeno no es frecuente en Buenos Aires, lo que lo convierte en un evento notable.
Las autoridades recomendaron a los ciudadanos limitar sus desplazamientos y utilizar luces antiniebla en sus vehículos. Los vuelos en el aeropuerto internacional también experimentaron retrasos debido a la baja visibilidad.
Este evento climático resalta la importancia de estar preparados para condiciones adversas, recordando a la población las medidas de seguridad necesarias en estas situaciones. Buenos Aires vuelve a la normalidad a medida que la niebla comienza a disiparse.
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