En septiembre se espera una gran oferta de hacienda gorda, lo cual podría llevar a una caída en los precios. La industria ganadera está atenta a estas fluctuaciones del mercado. Los productores se preparan para un mes desafiante, anticipando ajustes en sus estrategias comerciales. La demanda interna y externa jugará un papel crucial en determinar los precios finales. Expertos sugieren monitorear de cerca las tendencias y adaptarse rápidamente a los cambios del mercado.