“Buen día, primero de febrero… de enero… ¡septiembre!”, exclamó Jimena, completamente desorientada. Ante la risa de los presentes, intentó justificar su error: “Acaba de arrancar el ciclo… ¿Qué habrá ocurrido en febrero? No sé, febrero… porque no tengo ninguna fecha… Me tomé tres semanas de vacaciones y mi cabeza está en febrero”.
La confusión de Monteverde no terminó ahí. Al detallar el menú, se equivocó al nombrar varios platos, causando más risas: “Les digo el menú, por favor. Tenemos de entrada… ¿son brusquetas? No, no, son arepitas de espinaca… ¡No, eso es del sábado!”. Finalmente, Jimena reconoció entre risas: “No estoy bien hace rato, igual”.
A pesar del desliz, la cocinera mantuvo su buen humor y concluyó: “Bueno, me retiro y vuelvo nueva, te prometo. Reseteada”, dejando en claro que, a pesar de los errores, su carisma siempre es bien recibido en la mesa de Juana Viale.
—
Este correo electrónico ha sido analizado en busca de virus por el software antivirus de AVG.
www.avg.com