Harris y Trump, cara a cara: los cruces personales, las opiniones sobre el aborto, las guerras y el enojo del republicano

Harris remarcó que “no van a retroceder”, prometió trabajar para la gente, en un discurso que se podría definir como antigrieta y mencionó particularmente a su ejército, diciendo que le interesa tener la milicia “más letal” del mundo. “Ahora necesitamos alguien que se preocupe por ustedes y no se ponga en primer lugar”, definió. Trump la presionó señalando “por qué no hizo ya todo lo que promete”, como vicepresidenta actual del país. “Todo el mundo se ríe de nosotros, conozco a los líderes muy bien, me llaman. Vamos a tener una tercera guerra Mundial. Son el peor presidente y vicepresidenta en la historia del país”, insistió Trump en su lucha contra el excandidato Biden. 
“Qué harían para luchar contra el cambio climático?”, es la pregunta que inició este eje del debate. Harris recordó que Trump dijo que el fenómeno es un “engaño”, dijo que su administración invirtió en energía renovable, hizo referencia a una inversión de un billón de dólares en el clima, pero también habló de aumentar la producción de petróleo y gas. Trump evadió el tema directamente y dijo que la administración Biden fue “terrible” para la industria manufacturera. Llamativamente, continuó atacando a Biden, en vez de a Harris. 

Donald Trump dijo que “no le importa” el origen étnico y racial de Harris, tras ser citado por el coordinador del debate de haber dicho que ella “se volvió negra”. También opinó que el tema de la identidad racial en Estados Unidos es “exagerado”. Harris lo acusó de usar “el tema racial para dividir a los americanos” y definió esto como “una tragedia”. “No queremos este abordaje. Recordemos que inició su carrera como dueño de tierras y edificios y tuvo problemas por no querer alquilarle a familias negras”, sostuvo. También recordó el llamamiento de Trump a la ejecución de “los cinco de Central Park” en Nueva York. 
Luego Trump acusó a los demócratas de no querer mejorar la ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio, conocida como “Obamacare”, algo que prometió derogar y dijo que está trabajando en algo mejor, “que sea más barato para la gente y mejor que Obamacare”. Sin embargo, admitió no tener un plan definido todavía, sino “ideas”. En un cruce de temas inesperado, Trump reiteró que “Harris tiene un plan para confiscar armas y prohibir el fracking”. Ella le pidió que “deje de mentir”. “Tanto yo como Tim Walz (candidato a vicepresidente) tenemos armas  y siempre estuve a favor del fracking”, remarcó. 
Donald Trump aseveró que, si él fuese presidente, la invasión de Rusia a Ucrania y el ataque de Hamas no hubieran sucedido. También acusó a Harris de “odiar” al pueblo árabe y a Israel y que, por eso, el país “dejará de existir” si la demócrata gana las elecciones. Por su parte, la vicepresidenta dijo que Israel tiene derecho a defenderse, sobre todo de Irán, pero que tiene que haber un “alto al fuego”, con una solución para los dos Estados y paz para el pueblo de Gaza. “Dictadores y autócratas pueden manipular” a Trump, alertó. 

“Quiero que la guerra en Ucrania termine, quiero salvar vidas”, destacó Trump, tras una pequeña pausa en la que no tuvieron autorización para hablar con sus asistentes de campaña. “Zelenski y Putin me respetan, no lo respetan a Biden, ¿por qué lo harían?”, lanzó el expresidente y dijo que podría terminar ese conflicto en “24 horas”. Harris destacó que el debate es con ella, no con Biden, quien abandonó la carrera presidencial. “Si Trump fuera presidente, Putin estaría sentado en Kiev ahora con los ojos en el resto de Europa, empezando con Polonia”, increpó la vice. “Es la peor vicepresidenta de la historia y es una negociadora horrible”, la definió Trump.
“Estoy de acuerdo con la decisión de retirar a nuestros soldados de Afganistán. Donald Trump negoció uno de los tratos más débiles de la historia, negoció con la organización terrorista talibán y los invitó a Camp David, un lugar de diplomacia”, comentó Harris. “Me reuní porque estaban matando a nuestros soldados, me involucré por eso, le dije al líder que si seguía tendría problemas. Le envié una foto de su casa y no hubo muertes en 18 meses”, destacó Trump. “Ellos no cumplieron con los puntos del acuerdo, y por eso lo terminamos”, explicó y sumó: “Rusia atacó a Ucrania porque vieron lo débiles que son ella y su jefe”. Harris lo liquidó: “Putin se lo come vivo” a Trump, estableció. 

Harris invitó a la audiencia a acudir a un acto de Trump, para que observen que “habla de personajes ficticios” y “se van antes de tiempo, por cansancio y aburrimiento”. Trump destacó que nadie va a los actos de Harris y aseguró que hay personas en Ohio comiendo “perros y gatos”, dato que el coordinador del debate corrigió, citando a las autoridades locales. Harris criticó la propuesta de Trump de imponer aranceles generales de hasta el 20% a todas las importaciones, calificándola como “un impuesto sobre los bienes cotidianos que necesitas para llegar a fin de mes”.
Trump considera que el número de inmigrantes es mayor del oficial (11 millones) y dijo que llevaría adelante una gran política de deportación, porque “destruyen el entramado de nuestra sociedad”. Dijo que “entran terroristas, vendedores de droga” y definió un nuevo crimen como “delito inmigrante”. “Ella está destruyendo este país y, si llega a ser presidenta, este país no tiene ninguna posibilidad de éxito, terminará siendo Venezuela en esteroides”, comparó. La candidata de 59 años respondió a gran parte del lenguaje de Trump sonriendo y sacudiendo la cabeza, antes de contraatacar, señalando que era un delincuente convicto y llamándolo “extremo”.
Luego, Harris brindó duras críticas a la gestión de Trump, destacando el hecho de que numerosos altos funcionarios que trabajaron en su administración han dicho que es peligroso para Estados Unidos, ya que está en contra de la Constitución. La respuesta de Trump: “Los despedí. Por eso escribieron libros sobre mí”. Además, Trump mencionó su intento de asesinato al hablar sobre el uso del gobierno como un arma: “Probablemente recibí una bala en la cabeza por las cosas que dicen sobre mí”, lanzó. Continuó negando haber perdido las elecciones de 2020, se desligó del asalto a Capitolio y Harris luego exclamó que los “líderes del mundo se ríen” de Trump.

Trump se enorgullece de haber contribuido a la eliminación de las protecciones federales establecidas en el caso Roe vs. Wade en junio de 2022, permitiendo así que los estados regulen el aborto a su criterio. Por eso, al debatir al respecto, Harris denunció el caso de mujeres que son obligadas a llevar embarazos a término en casos de muerte fetal y abuso sexual en menores de edad. 
Trump la acusó de mentir y fue corregido por la coordinadora del debate, al hablar sobre mujeres abortando a los nueve meses de gestación y “ejecutando bebés que ya nacieron”. “Fui líder en la fertilización asistida”, se defendió el expresidente y cruzó a los demócratas, calificándolos de “radicales”. Harris dijo que sus palabras eran “insultantes para las mujeres de Estados Unidos”. 
Los candidatos se saludaron con un apretón de manos y comenzó con un comentario sobre la economía y el costo de vida de los estadounidenses. Comenzó Harris, asegurando que es la única candidata de clase media, por lo que habló de una “economía de oportunidades”. Aseguró que su pasión son los negocios familiares, prometió ofrecer a las familias un crédito fiscal de hasta 6.000 dólares por cada hijo que cumpla los requisitos, así como una deducción fiscal de 50.000 dólares para las pequeñas empresas, y dijo que “Trump no tiene plan para ustedes, porque está enfocado en defenderse a sí mismo”. También afirmó que el plan de gobierno de su contrincante causaría inflación y recesión. 
Por su parte, Trump defendió su presidencia, su gestión de la pandemia y prometió expulsar a inmigrantes “criminales con enfermedades mentales” porque son quienes “roban nuestros trabajos”. También afirmó que Kamala Harris no tiene un plan económico propio, que copió al de Joe Biden y dijo que China los está “estafando”. Harris respondió diciendo que, de hecho, Trump financió el desarrollo militar de China, al venderles chips electrónicos. “Eso lo compraron a Taiwán, nosotros ya no los fabricamos”, contestó Trump y la acusó de “marxista”. Trump negó que impondría un impuesto a las ventas, pero admitió que otros países enfrentarían aranceles comerciales de un mínimo del 10 por ciento. 
Trump se distanció del Proyecto 2025, de la Heritage Foundation, elaborado por cientos de conservadores de alto perfil. “No lo he leído. No quiero leerlo, a propósito. No lo voy a leer”, dijo. Por su parte, la vicepresidenta acusó a su contrincante de dejar “el peor desempleo desde la Gran Depresión (…) la peor epidemia de salud pública en un siglo (y) el peor ataque a nuestra democracia desde la Guerra Civil. Lo que hemos hecho es limpiar el desastre de Donald Trump”, dijo Harris. 
 
El debate durará 90 minutos con pausas comerciales 
El martes 3 de septiembre se lanzó una moneda para establecer la ubicación del podio de los candidatos 
No se divulgarán con antelación los temas que se desarrollarán
El personal de campaña no podrá interactuar con los candidatos durante las pausas comerciales 
 Los candidatos tendrán dos minutos para responder las preguntas, dos minutos para refutar y un minuto adicional para hacer seguimiento, aclaraciones o respuestas.
Las alocuciones finales de ambos aspirantes a las elecciones en EE.UU 2024 tendrán una duración de dos minutos. El orden en el cual hablarán se decidió mediante un lanzamiento de moneda virtual, en el que Donald Trump ganó el derecho a elegir y optó por ser el último en hablar.
El experto en predicciones electorales, Allan Lichtman, aseguró que “Kamala Harris será la próxima presidenta de EE.UU. Esa es mi predicción en esta carrera” y se impondrá en las urnas frente a Donald Trump el próximo 5 de noviembre. 
Con su método de predicción basado en 13 “claves” o preguntas generales sobre los candidatos, sus partidos y el contexto económico, político y social, el historiador local de 77 años, ideó su propio modelo y acertó, casi todos los resultados de los comicios del país de los últimos 40 años. 
 Su enfoque académico abarca la historia política de Estados Unidos, los derechos civiles y de voto, y es considerado uno de los analistas políticos más influyentes de su generación.
 
 
PM/ML


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