El hecho tuvo lugar alrededor de las 5:30hs del pasado viernes, cuando vecinos del complejo de edificios Leabank llamaron a la policía, alertados por gritos y disparos. Una vez allí, los efectivos se encontraron con Juliana Falcón , a su hijo Kyle (16) y su hija Giselle (13), con heridas de balas, por las cuales murieron en el departamento.
El autor de la espeluznante tragedia intrafamiliar fue Nicholas Prosper, a quien los policías detuvieron a 600 metros del domicilio con el arma en su poder.
Hasta el momento no se esclarecieron los motivos que llevaron al joven a cometer el triple homicidio, aunque las autoridades británicas están realizando diferentes peritajes psiquiátricos para determinar si el joven podría haber sufrido alguna alteración mental al momento del asesinato.
Falcón se mudó a Inglaterra en busca de nuevas oportunidades. Una vez allí conoció a Ray Prosper, con quien formó una familia y tuvo tres hijos. En la comunidad de Luton era conocida como “Julie”, junto a su apellido de casada, y destacaba por su espíritu altruista y su colaboración con causas benéficas.
Por otro lado, su hijo Kyle de 16 años era una joven carismático, dedicado al fútbol y el boxeo y con un perfil activo en TikTok. Según compartió la BBC, los amigos destacaron su alegría y sentido del humor y aseguraron que “era un gran talento con un enorme potencial”.
Giselle, de 13 años, fue definida por sus allegados como un “alma hermosa”. La niña asistía a la escuela en Lea Manor High School, donde resaltaba por su desempeño académico. Desde la institución, la directora lamentó la pérdida y se le brindó apoyo psicológico a los alumnos y al personal luego de lo ocurrido.
AS.
LT.
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