La cobertura cambiaria para la deuda mexicana aumenta ante la posibilidad de un segundo mandato de Trump. Los mercados temen más tensiones comerciales entre Washington y sus principales socios, incluido México. Actualmente, alrededor del 36% de la exposición de los inversionistas a la deuda mexicana está cubierta contra un debilitamiento del peso. Esto refleja la preocupación por el riesgo que representa un eventual triunfo de Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
Existe una creciente incertidumbre sobre las relaciones comerciales entre Estados Unidos y sus socios, lo que ha llevado a los inversores a buscar protección contra la volatilidad cambiaria. Datos de State Street muestran que la cobertura mundial de los medios sobre las elecciones estadounidenses es aproximadamente el doble que en 2016. Esto sugiere que los riesgos electorales están en el radar de los inversionistas y refuerza la necesidad de una mayor cobertura cambiaria en la deuda mexicana.
El nerviosismo se intensifica con el aumento de las apuestas a una mayor apreciación del peso mexicano. Si bien el peso registró un repunte récord frente al dólar el año pasado, las elecciones presidenciales tanto en Estados Unidos como en México generan preocupaciones entre los inversionistas. La incertidumbre política y económica está impulsando una mayor precaución en el mercado financiero, lo que se refleja en el aumento de la cobertura cambiaria para protegerse contra posibles fluctuaciones del peso mexicano.