El gobierno de Vidal se enfrenta a un desafío crucial: la recomposición salarial en medio del recorte de las ayudas financieras nacionales. Hoy, 20 de febrero, reinician las paritarias centrales tras un cuarto intermedio desde la reunión docente del día 6. Este hito paritario tendrá repercusiones en las negociaciones con otros sectores como docentes, judiciales y policía, todos afectados por la falta de aumentos y la inflación.
La negociación con los gremios centrales marcará un punto de partida en la estrategia del gobierno. Se espera una propuesta que refleje la habilidad negociadora y la distribución de fondos para salarios. La educación es un caso testigo, donde las obras de mantenimiento son necesarias pero no pueden justificar una propuesta salarial insuficiente.
ATE, UPCN y APAP piden un aumento del 30%, mientras que los judiciales y otros sectores buscan incrementos acordes a la inflación. La negociación con ADOSAC será clave, especialmente para la recuperación salarial docente y la inclusión de la cláusula gatillo.
Las paritarias centrales establecen un precedente para otros acuerdos salariales. Si el gobierno no logra satisfacer las demandas, podría enfrentar problemas similares a la gestión anterior. La recuperación de los 180 días de clases es fundamental, pero el aspecto salarial es esencial para lograrlo.
En resumen, el gobierno de Vidal se encuentra ante un importante desafío en la negociación salarial, con repercusiones en diversos sectores y en la calidad educativa de la provincia. La habilidad negociadora y la distribución de fondos serán clave para alcanzar acuerdos satisfactorios y evitar conflictos futuros.