En lugar del programa anterior, se implementarán dos nuevos planes: “Volver al Trabajo” y “Acompañamiento Social”. Estas iniciativas están diseñadas para abordar específicamente las necesidades de diferentes grupos demográficos y mejorar las oportunidades de empleo formal. Se espera que esta reestructuración beneficie a una amplia porción de la población, brindando orientación, capacitación y apoyo integral.
Una de las principales razones detrás de esta medida es eliminar la intermediación en la distribución de beneficios, asegurando que los recursos lleguen directamente a los beneficiarios sin posibilidad de discrecionalidad en su manejo. Esto apunta a aumentar la transparencia y eficiencia en la administración de los programas sociales.
Además, se han tomado acciones para simplificar los procesos administrativos y reducir la burocracia asociada con la gestión de estos programas. La eliminación de planillas de asistencia y la flexibilización de requisitos de presencialidad son ejemplos de estas medidas.
Por otro lado, se destaca la importancia de promover la autonomía y libertad de elección de los individuos, permitiéndoles optar por el programa que mejor se adapte a sus necesidades y aspiraciones laborales.
En resumen, esta reestructuración en los programas sociales busca mejorar la eficiencia, transparencia y efectividad en la entrega de asistencia y oportunidades laborales, al tiempo que promueve la autonomía y libertad de elección de los beneficiarios.