El líder ruso destacó la gravedad de la situación, alertando sobre las “trágicas consecuencias” que podrían desencadenarse si algún país decide enviar tropas a Ucrania. Esta advertencia se produce en un momento crucial, a solo dos semanas de las elecciones presidenciales en Rusia, donde Putin no enfrenta competencia significativa. Además, Putin subrayó la capacidad de Rusia para responder a cualquier amenaza, asegurando que poseen armas capaces de alcanzar objetivos en el territorio de sus adversarios.
En respuesta a los recientes avances de la OTAN hacia el este y la participación de Finlandia y Suecia en esta alianza militar, Putin anunció la reinstalación de distritos militares en las provincias de Moscú y Leningrado. Esta medida, según Putin, es necesaria para hacer frente a la creciente presencia militar occidental en la región. Putin compareció en una posición de fuerza, destacando los avances del Ejército ruso en el conflicto en Ucrania y señalando la superioridad de sus fuerzas sobre las de Ucrania, respaldadas por armamento suministrado por países occidentales.
Las declaraciones de Putin han generado una intensa preocupación en la comunidad internacional, especialmente en medio de la escalada de tensiones en Ucrania. El presidente francés, Emmanuel Macron, ratificó sus declaraciones sobre la situación en Ucrania, destacando la gravedad del conflicto y la necesidad de aumentar el apoyo a Ucrania para garantizar su seguridad. Sin embargo, las palabras de Macron también han generado controversia, especialmente sus comentarios sobre la posibilidad de enviar tropas occidentales a Ucrania, rompiendo un tabú en la política internacional.