Las advertencias incluyeron ubicaciones específicas, como Seguí y Oroño, con la amenaza de tomar medidas drásticas si se acercaban. Además, se mencionó que si no abandonaban Rosario, “van a terminar como José Luis Cabezas”, haciendo referencia al fotógrafo asesinado en 1997 luego de capturar una foto comprometedora.
Este suceso ocurre en medio de una ola de crímenes relacionados con el narcotráfico en la ciudad, lo que ha generado un clima de miedo y tensión entre los habitantes. La situación ha llevado a que Rosario se paralice, con la ausencia de servicios básicos como transporte público y gasolineras, y un temor generalizado a nuevos ataques.
José Luis Cabezas fue un reconocido reportero gráfico asesinado en 1997, tras capturar una imagen que involucraba al empresario Alfredo Yabrán. Su crimen sigue siendo recordado como uno de los más impactantes contra la libertad de prensa en Argentina.
Las autoridades están investigando estas amenazas mientras la comunidad periodística y ciudadana condena estos actos de violencia y presiona por justicia y seguridad en la región.