El gobernador ha solicitado a varias instancias gubernamentales que estudien a fondo el caso, incluido el Fiscal de Estado y el ministro de Gobierno. Esta consideración se produce en medio de un contexto más amplio de reivindicación de la actuación policial y discusiones sobre la legitimidad de las acciones de los agentes en situaciones de confrontación con delincuentes.
El caso específico del agente Luciano Nocelli, quien mató a una pareja de ladrones en Rosario, ha generado debate en la sociedad y entre expertos legales. Algunos argumentan que su actuación fue un caso de gatillo fácil, mientras que otros defienden que actuó en legítima defensa. La posibilidad de un indulto en este caso sería una medida sin precedentes en la historia de la provincia de Santa Fe y ha generado opiniones encontradas.
Además del caso de Nocelli, el gobernador también estaría considerando perdonar a otro policía, Marcelo “Conejo” Gómez, quien fue destituido e imputado por su presunta participación en levantar custodias que luego fueron atacadas por bandas narcocriminales. Estos movimientos del gobierno provincial han generado controversia y preocupación en diversos sectores de la sociedad santafesina.
En resumen, la posibilidad de indultar a policías condenados por casos de gatillo fácil ha generado un intenso debate en Santa Fe, con opiniones divididas sobre la legitimidad de estas acciones y sus implicaciones para la seguridad pública y la justicia en la provincia.