El “Pacto de la Chicharrita” incluye cooperación en la financiación para los agricultores afectados y la aceleración en la aprobación de tratamientos fitosanitarios. Este esfuerzo conjunto también implica monitoreos coordinados por el Senasa y el INTA, y el apoyo del Servicio Meteorológico Nacional para evaluar el impacto climático en la proliferación de la plaga.
Los líderes regionales y funcionarios nacionales subrayaron la importancia de un manejo integrado y proactivo de la plaga, con un enfoque en la sostenibilidad y la eficacia a largo plazo. Se destacó la necesidad de una respuesta rápida y efectiva ante el incremento de daños observados recientemente.
Palabras Clave:
chicharrita, maíz, Santa Fe, plaga, agricultura