El cierre definitivo del Ministerio de Mujeres, creado durante la administración de Alberto Fernández, fue anunciado recientemente, con sus funciones transferidas al Ministerio de Justicia. La UCR considera que esta decisión forma parte de un plan para retroceder en los derechos de las mujeres, vulnerando conquistas históricas y compromisos internacionales.
En respuesta a la crítica, el diputado oficialista José Luis Espert defendió la medida, argumentando que la lucha contra la violencia de género debe gestionarse desde las comisarías y municipios, no desde estructuras estatales que calificó de ineficaces. Para Espert, las comisarías y los municipios están más cerca de la gente y son más eficaces en esta lucha.
El Ministerio de Justicia justificó el cierre del Ministerio de Mujeres afirmando que este organismo había sido utilizado con fines político-partidarios y que su eliminación era necesaria para racionalizar la administración pública. La UCR, sin embargo, insiste en que una sociedad justa e igualitaria requiere un Estado comprometido con la protección de las mujeres y diversidades sexuales.
La polémica sigue creciendo, con opiniones divididas sobre la efectividad y necesidad de ministerios especializados para abordar problemáticas específicas como la violencia de género. Mientras tanto, las mujeres siguen luchando por sus derechos y por el apoyo estatal en la erradicación de la violencia.
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