Tras el triunfo ante Canadá, los jugadores de la Selección Argentina no dudaron en expresar su descontento con el estado del campo de juego del Mercedes-Benz Stadium. Lionel Messi y otros jugadores describieron la cancha como un “desastre”, indicando que la superficie afectó el desarrollo del juego y podría haber causado lesiones.
El mal estado del campo se notó desde los primeros minutos del partido, con áreas irregulares y parches de césped suelto que dificultaban el control del balón y aumentaban el riesgo de resbalones. Esta situación generó preocupaciones no solo entre los jugadores, sino también en el cuerpo técnico y los aficionados presentes.
A pesar de las dificultades, Argentina logró adaptarse mejor que su rival y controlar el partido. La queja sobre el campo pone en evidencia la necesidad de un mantenimiento adecuado de las instalaciones para asegurar condiciones óptimas en todos los partidos del torneo.
El entrenador Lionel Scaloni también comentó sobre el tema en la conferencia de prensa posterior al partido, subrayando la importancia de proporcionar un entorno seguro y adecuado para que los jugadores puedan desempeñarse al máximo de sus capacidades.
La organización de la Copa América fue informada de estas preocupaciones y se espera que tomen medidas para mejorar las condiciones del campo para los próximos encuentros. Mientras tanto, Argentina se prepara para su siguiente partido contra Chile, donde buscarán continuar con su racha de victorias.