El vocero presidencial, Manuel Adorni, había indicado previamente que el Gobierno no transferiría el Fondo Nacional de Incentivo Docente, argumentando que los sueldos serían responsabilidad de los gobiernos provinciales. Sin embargo, se considera evaluar una convocatoria para resolver esta situación y evitar posibles retrasos en el inicio de clases.
La paritaria nacional docente establece el salario mínimo para los maestros, que luego será negociado por las provincias y los sindicatos. La última convocatoria se realizó en septiembre, fijando el salario mínimo en 250 mil pesos para diciembre. Dada la alta inflación, los líderes sindicales presionarán por aumentos que amortigüen su impacto.
Además, se informa que la gestión de Javier Milei ha decidido suspender los aportes nacionales al salario docente, incluyendo el Fondo Nacional de Incentivo Docente y el Fondo de Compensación Salarial. Esta medida ha generado preocupación entre los docentes, quienes reclaman una pronta solución por parte del Gobierno para evitar afectaciones en sus ingresos.
En resumen, la convocatoria a la paritaria nacional docente se presenta como un paso crucial para garantizar el inicio de clases y resolver las tensiones salariales entre los maestros y el Gobierno.